EN EL LIBRO DE NÚMEROS SE RETRATA BIEN UN PASAJE QUE EXPLICA EL MOMENTO CORRECTO PARA ACTUAR, DEJAR DE ACTUAR Y PROSEGUIR… INCLUSO VÁLIDO PARA LOS DÍAS DE HOY.

Números 9.15-23
“15 ‘Y el día que fue erigido el tabernáculo, la nube cubrió el tabernáculo, la tienda del testimonio, y al atardecer estaba sobre el tabernáculo como una apariencia de fuego, hasta la mañana.”

El guía del pueblo de Dios era esta nube. Era la Presencia de Dios dirigiendo a Su pueblo que antaño había sido esclavo. Cuando la nube se paraba, erigían el Tabernáculo y cuando la Nube bajaba sobre el Tabernáculo, se transformaba en la Tienda del Testimonio.

¿Y qué significa esto para nosotros? Cada uno de nosotros, que ya hemos sido liberados, el Señor Jesús nos perdonó, liberó y salvó y, ahora, vivimos en el mundo, que representa el desierto. Y en él, enfrentamos dificultades, tentaciones, persecuciones, discriminaciones… en suma, enfrentamos barreras que nos impiden llegar a la Tierra Prometida, o sea, disfrutar de una vida que Dios prometió, porque el diablo sabe que el éxito se reflejará no sólo en la vida de tus familiares, como también en la vida de las personas que están directamente unidas a ti.

Pero para eso, tenemos que hacer igual que el pueblo de Dios hacía, Él iba delante y nosotros tenemos que seguirle. Es Él quien tiene que dar una dirección que nos inspire y así, no te quedarás indefinido, dividido o con miedo, al contrarios, recibes una fuerza, valentía y disposición sobrenaturales. Entonces, cuando comienzas a actuar, ya no pierdes tiempo y lo resumes, o sea, lo que tendría que ocurrir dentro de 1, 3, 5 o 10 años, ocurre en un espacio temporal mucho más pequeño.

¡Dios quiere que cada uno de los que siguen Su Dirección, que se somete a Él, que Le obedece y respeta, que también sea una “tienda del Testimonio”, que sea un testimonio vivo de la Dirección, Cuidado y Amparo de Dios!

Este pasaje nos muestra que la prioridad era Dios y no las necesidades del pueblo. La prioridad era que el Tabernáculo se estableciera para que, así, se convirtiera en Tienda del Testimonio y el pueblo, de esta forma, pudiera disfrutar de la Dirección, de la Protección y del Cuidado Divino.

“16- Así sucedía continuamente; la nube lo cubría de día, y la apariencia de fuego de noche.”

La noche aquí representa los momentos difíciles, pues es por la noche cuando el ser humano más siente la soledad y se siente sensible y vulnerable. Las persecuciones, las circunstancias, la envidia, la miseria, la mentira, la injusticia, la discriminación… todo eso hace que la vida del ser humano se convierta igual que la noche, oscura y tenebrosa. Pero, con Dios, incluso durante al noche, Su Luz y y Su Fuego nos dan Protección, Cuidado y Realización.

¡Dios es contigo, y yo también!