Medite en el mensaje de hoy

El mundo está lleno de personas amadas que no valoran el amor que reciben. Son personas que tienen padres que les enseñan y las protegen, pero ellas no los consideran. Tienen una salud perfecta y no le dan ni la mínima importancia.

Son personas que duermen bien, se despiertan bien, tienen un trabajo donde ir, un hogar donde regresar, un cielo para contemplar, un alimento para sustentarse…

En fin, todos conocemos a personas que tienen mucho y que no reconocen el valor de su riqueza.

Probablemente, solo se darán cuenta de sus privilegios cuando los pierdan.

De la misma manera que Adán y Eva en el Edén. Ellos solo vieron que el jardín era una dádiva inmensa después de haberlo perdido.

El que no valora tampoco agradece, no retribuye y no aprovecha lo que tiene como debería. A causa de esto, esta persona echará todo a perder.

Algunas pérdidas pueden recuperarse. Sin embargo, otras, aunque usted llore, solloce, patalee, pida perdón, etc., nada será como antes.

Entonces, solo permanecerá la nostalgia del amor perdido, del tiempo echado fuera, de las groserías que podrían haberse evitado, de las oportunidades que no se aprovecharon…

Nubia Siqueira