El mantenimiento de la fe consiste básicamente en tres cosas:

1.° Creer, es decir, obedecer y confiar en Dios a través de Su Palabra.

2.° Combatir las dudas es no alimentarlas.

– Vencer la duda de que fue perdonado;

– de que están hablando mal de usted;

– de que Dios no lo usará;

– de que no tiene la fe suficiente;

– de que su familia no será salva;

– de que no fue bautizado en el Espíritu Santo (en caso de que ya tenga Sus frutos);

– de que pecó contra el Espíritu Santo;

– de que su carne o voluntad es más fuerte que su fe.

3.° Confiar en Dios. Esto requiere soportar las dificultades, porque nos hacen madurar.

«Mirad, hermanos, que no haya en ninguno de vosotros corazón malo de incredulidad para apartarse del Dios vivo; antes exhortaos los unos a los otros cada día, entre tanto que se dice: Hoy; para que ninguno de vosotros se endurezca por el engaño del pecado. Porque somos hechos participantes de Cristo, con tal que retengamos firme hasta el fin nuestra confianza del principio…» Hebreos 3:12-14

¡Nos vemos en la IURD o en las nubes!