CONSEJOS PARA CONVERTIRSE EN UN CONSTRUCTOR DE TESTIMONIO- CONSEJO #3

Consejo 3: Desarrollar la valentía

En su significado literal, la valentía es la capacidad de acción a pesar del miedo, del temor o de la intimidación. Esa es la característica que nos motiva a ir más allá. Es una cualidad primordial, pues garantiza que nuestras otras cualidades florezcan. Ser valiente es entregar el miedo en las manos de Dios y seguir adelante, con disposición para arriesgar.

  • La valentía comienza con una lucha interior, al buscar hacer lo que tenemos miedo de hacer. Arriesgar en un área desconocida, con el objetivo de progresar.
  •  Actuar con valentía nos lleva a descubrir el auge de nuestra capacidad, pues frente a los desafíos encontramos la oportunidad de dar lo mejor de nosotros y así cambiar el rumbo de las cosas.
  • La actitud de valentía, además de beneficiarnos a nosotros mismos, inspira a nuestros familiares e incluso compañeros de trabajo a hacer lo mismo.
  • La búsqueda constante para mantener la sensación de seguridad anula nuestro don de emprendimiento. Por otro lado, el acto de agudizar la valentía nos abre un abanico de nuevos horizontes y la oportunidad de construir un futuro mejor.
  • Necesitamos creer en la valentía y, cuando identificamos que un miedo nos domina, debemos orar y depositarlo a los pies de Aquel que nos dirige. Rápidamente, debemos dominar ese miedo a través de nuestras acciones, y hacer lo que está más allá de nuestra capacidad, pues así desarrollamos la valentía.

Promovemos nuestra valentía al hacer algo que nos impulsa a enfrentar el miedo. Por ejemplo: cuando conversamos con alguien a quien le tenemos miedo, cuando sacamos una idea o sueño del papel, cuando damos un primer paso…

Muchas veces una actitud de valentía es lo que necesitamos para salir del lugar y empezar a recorrer el camino del éxito en todas las áreas.

Sea valiente. Anímese. Tome la actitud. Luche con todas las fuerzas.

«Anímate y esfuérzate, y manos a la obra; no temas, ni desmayes, porque el Señor Dios, mi Dios, estará contigo; Él no te dejará ni te desamparará, hasta que acabes toda la obra para el servicio de la casa del Señor.” 1 Crónicas 28:20

Gislene Xavier.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.