“El que es fiel en lo muy poco, también en lo más es fiel; y el que en lo muy poco es injusto, también en lo más es injusto.” Lucas 16:10
El principio espiritual de la fidelidad se basa en algo que la mayoría de las personas desprecian: la lealtad en las pequeñas cuestiones.
El Señor Jesús dijo que la dedicación genuina se ve, en primer lugar, en la manera en la que lidiamos con los pequeños detalles de la vida.
Al ser infiel en lo poco, el ser humano muestra que no tiene su conciencia sensible a la voz de Dios en ninguna otra circunstancia.
Es fácil entender este concepto, porque todo lo grande que vemos hoy, un día comenzó pequeño. Por ejemplo, los que cometen graves errores, un día comenzaron con deslices insignificantes.
El que robó grandes valores monetarios, seguramente comenzó con pequeños robos, como llevarse una lapicera de su lugar trabajo a la casa.
El que hoy engaña y perjudica a los demás, sin ningún peso en la conciencia, comenzó su carrera de estafador al contar pequeñas mentiras.
Por lo tanto, esa deshonestidad, que está tan arraigada en nuestra sociedad, comienza de manera individual cuando la persona ignora el pilar del carácter y de la honradez que es considerar la fidelidad en todo. Me refiero, principalmente, en lo que nadie nota, porque es posible que los hombres no
vean la rectitud en las pequeñas actitudes, pero Dios no solo las ve, sino que también recompensa.
‘’… Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu Señor.” Mateo 25:21
Esa visión de fidelidad en lo poco les sirve de advertencia a las personas que dicen que serán diezmistas y que darán ofrendas a la Casa de Dios cuando se vuelvan prósperas, pero el principio divino funciona precisamente de manera opuesta. Eso se debe a que, si no hay fidelidad en lo “poco”, jamás habrá fidelidad en lo “mucho”.
Ser fiel en la más pequeña tarea, en las funciones más insignificantes o en los asuntos menores de la vida es el camino que nos pone en la cima del corazón de Dios. Porque Él no nos juzga solo por las actitudes sino por las intenciones que se esconden detrás de ellas. Por eso, ser “fiel en lo poco” muestra que, de hecho, es fiel en todo.
Núbia Siqueira